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Si hay un cálculo que debemos tener controlado a nivel logístico es la rotación de stock o de ventas, ya que permite saber las veces que necesitamos abastecer el almacén con existencias nuevas tras las ventas. Pero calcular la rotación de inventario no sólo es fundamental para la gestión del almacén de una empresa, sino que tiene repercusión a nivel financiero, de ahí que deba estar controlado. Por eso hemos desarrollado esta calculadora que permite saber el índice de rotación de stock de nuestra empresa de forma fácil y sencilla y así actuar en base a los resultados obtenidos.
¿Cómo funciona esta calculadora?
Para poder saber cuál es el ratio de rotación de existencias de nuestra empresa sólo necesitamos 2 pasos:
- Introducir en el primer campo la cantidad de aprovisionamiento que tenemos (en unidades)
- Y en el segundo campo indicar de cuántas existencias disponemos (también en unidades)
Finalmente, tras pulsar el botón de Calcula obtendremos el número de veces que hemos vendido o rotado las existencias durante el periodo de tiempo que hayamos utilizado de referencia a la hora de elegir los datos de aprovisionamiento y existencias.
¿Alto o bajo? Cómo interpretar este cálculo
Normalmente un ratio de rotación de stock alto se considera mejor que uno bajo porque indica que se están generando más ventas con menor inversión en stocks. No obstante, no todos los sectores son iguales, por lo que deberemos tener en cuenta el sector al que pertenece nuestro negocio antes de sacar conclusiones pues:
- el sector industrial suele tener índices de rotación entre 4 y 5
- las grandes superficies suelen llegar a 8
- los supermercados e hipermercados pueden llegar a 25, sobre todo en el caso de los productos de alimentación
Si bien es cierto que cuanto mayor sea el ratio de rotación de existencias, más ventas se generan y mejor se gestionan las existencias, un índice de rotación alto requiere de una gran fluidez en el trabajo de almacén porque el movimiento es constante. Esto no sólo afecta a nivel de funcionamiento, sino también a los costes de gestión, los cuales suelen ser más altos.
En cambio, si el índice de rotación de stock es bajo quiere decir que tenemos un exceso de inventario, pues tardamos en reponer los productos. Las principales consecuencias de este bajo ratio son el incremento de los costes de almacenamiento y el riesgo de que los productos se queden desfasados o anticuados.
Lo ideal es encontrar el punto de equilibrio que los permita reponer los artículos en el tiempo mínimo necesario sin que estos permanezcan en el almacén más tiempo de lo necesario.
Tan importante es evitar la acumulación de stock como la ruptura del mismo, pues supondrá la falta de mercancías para hacer frente a la demanda, así como la pérdida de ventas e incluso de clientes.
Fórmulas que permiten calcular el IR del stock
El cálculo de este índice se puede basar en 2 tipos de datos, la cantidad de aprovisionamiento y de existencias o el valor de ambos. Para ello disponemos de 2 tipos de fórmulas distintas:
El índice de rotación de existencias a través de un ejemplo
Vamos a suponer que nuestra empresa tiene un total de 60.000 unidades de aprovisionamiento y 10.000 unidades de stock. El cálculo que deberíamos hacer es:
Según este resultado, a lo largo del año hemos rotado el inventario 6 veces, lo que se traduce en una renovación de inventario cada 2 meses (12 meses / 6 veces = 2 meses), lo que quiere decir que los artículos estuvieron 2 meses en el almacén antes de venderse.
La importancia de calcular la rotación de ventas
La importancia de este índice está directamente relacionado con el coste de oportunidad que provoca y la inversión de capital que implica. De hecho, uno de los objetivos de este cálculo es lograr maximizar el uso de los recursos disponibles.
Asimismo, el cálculo del ratio de rotación de inventarios permite valorar la competitividad de la empresa, sus beneficios y su situación en el sector.
Cómo afecta el IR a la gestión del almacén
El ratio rotación de stock influye a la hora de controlar y gestionar los almacenes en diversos aspectos:
- El coste de almacenamiento de la empresa: estos costes se ajustan en base al Índice de Rotación de existencias dado que dependen de la frecuencia con la que se venden y se reponen los artículos.
- La distribución del almacén: el IR determina cómo se colocan y se clasifican los productos según el sistema ABC, en el que:
- A = alta rotación
- B = media rotación
- C = baja rotación
- La capacidad de almacenamiento: a través del control del IR podemos gestionar cuál es el espacio disponible para almacenar artículos y cuál es el espacio que ya está ocupado.
- La regulación de los flujos de trabajo: cuantos más niveles de ratio de rotación haya en el almacén, más compleja será su gestión y, por tanto, los flujos de trabajo tendrán que ser más rápidos y efectivos.
¿Qué beneficios nos aporta saber la rotación de existencias?
Además de actuar como indicador del estado de la empresa, el cálculo de este ratio supone muchas más ventajas para nuestro negocio, entre las que destaca:
- Lograr un aumento de la cartera de clientes
- Llegar a tener una mayor presencia en el mercado gracias a un incremento del branding de la empresa
- Incrementar la facturación debido al mayor número de ventas
- Disminuir el riesgo de que los artículos sean dañados por el tiempo de espera en stock
- Rebajar los costes de almacenamiento
- Potenciar al máximo el rendimiento del capital invertido
- Reducir al mínimo las posibles pérdidas porque los artículos caduquen o queden obsoletos.
Cómo mejorar el índice de rotación del stock
Una vez sepamos el IR de nuestra empresa podremos poner en marcha algunos métodos de venta que nos ayudarán a mejorar el ratio de rotación y la venta de mercancías:
- Vender productos de temporada: los productos de temporada tienen una mayor demanda y admiten un precio de venta mayor, por lo que también conseguiremos más margen de beneficio.
- Ofrecer rebajas o promociones: podemos aplicar un descuento sobre el precio de venta en aquellos productos que no se han vendido al finalizar la temporada. Si bien es cierto que evitaremos su coste de almacenaje, también implicará un margen de beneficio menor.
- Liquidar el stock: si tras varias reposiciones de existencias seguimos teniendo artículos de temporadas anteriores que no conseguimos vender mediante rebajas podemos aumentar su descuento para conseguir venderlos y acabar con dichas existencias restantes.
- Vender los remanentes: en caso de que las dos últimas estrategias, las de rebajas y liquidación, no hayan funcionado y siga habiendo existencias, se puede intentar darles salida a través de otras empresas o intermediarios, pero el margen de beneficio es este caso será mucho más bajo.
¿Qué hacer si el ratio de rotación es muy bajo y tengo exceso de stock?
Cuando la mercancía se acumula en el almacén y necesitamos darle salida lo más rápidamente posible para evitar daños u obsolescencia lo mejor que podemos hacer es recurrir a las rebajas, las ventas flash y las liquidaciones. A cambio deberemos sacrificar margen de beneficio.