El ejercicio contable es el periodo que hay entre un balance contable de una empresa y otro de forma consecutiva. Es decir, es el periodo en el que la empresa realiza su actividad.
En el caso de España, el ejercicio contable coincide con el ejercicio económico natural. La implicación que esto tiene en el ejercicio contable presente es que se tienen en cuenta algunos datos del ejercicio contable anterior (de un año inmediatamente atrás). Es decir, que se tiene en cuenta el saliente anterior y el naciente posterior.
Esto no quiere decir que en todos los países ni en todas las empresas sea igual. Como hemos comentado, eso sucede en el caso de España, en otros países puede variar, incluso no llegar a coincidir con el año natural (365 días).
¿Cómo se compone el ejercicio contable?
Es importante que tengamos en cuenta cuál es el periodo que implica el ejercicio contable, ya que recoge datos de la actividad y resultados empresariales que tendremos que analizarlos y compararlos con otros ejercicios. También tenemos que tener en cuenta lo que hemos dicho anteriormente, ya que por ejemplo, en Estados Unidos, el ejercicio contable empieza el 1 de octubre y termina el 30 de septiembre del año posterior.
Por otro lado, el ejercicio contable o fiscal puede dividirse en: mes, trimestre o semestre, en el que realizar evaluaciones acerca de tendencias y análisis de la situación. Estos subperiodos permiten a los investigadores y analistas conocer datos para poder realizar perspectivas generales del año o del periodo que se esté analizando.
Es importante, entonces, que tengamos clara la relación entre los resultados y su análisis y la información de los inversores y agentes que pueden resultar de interés (administración pública, socios, accionistas, etc).
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