Valor base

¿Sabías que el valor base es un elemento clave a la hora de disponer de un activo? La razón la encontramos en que para poder conocer las ganancias de capital y los impuestos resultantes del activo necesitamos saber el valor base, el cual no es otra cosa que el coste de un activo a efectos impositivos.

¿Y qué quiere decir eso? Pues que este precio, que también es conocido como base imponible, es sobre el cual se calculan tanto la depreciación como la amortización; así como también hay otros gastos del activo fijo, como los capitalizados, que también se añaden a este valor base.


La traducción de todo esto en los precios de venta es que a mayor valor base, y por tanto, el valor contable depreciado, el beneficio del capital imponible será menor.

¿Qué debemos tener en cuenta para gestionar el valor base?

Si hay un departamento que debe tener controlado este valor base de sus activos es el de contabilidad. Si bien en las empresas grandes es más fácil vigilar de cerca este valor, en el caso de las empresas pequeñas se complica, pues el personal es más reducido. Por eso lo más recomendable es asegurarse de que el valor base es concreto y hacer un registro minucioso del mismo.

Otro aspecto importante sobre el valor base es que no hay que confundirlo con el valor justo de mercado. Mientras que el valor base es el precio exacto que tiene un activo, el valor justo de mercado es solo un precio estimado que podrían llegar a pagar por el activo en el mercado.