Regla 72
La regla 72 o regla del 72 es una regla usada en finanzas y cuyo objetivo es poder calcular el tiempo que se va a tardar en poder doblar una inversión teniendo en cuenta diferentes aspectos. Es una de las reglas más famosas por los expertos en esta materia.
Es importante que, antes de adentrarnos en conocer cómo funciona la regla 72, sepamos que hay dos tipos de interés: simple y compuesto. Tienen en común su forma de calcularse: multiplicar la tasa de interés por el número de días y el importe de la inversión.
No obstante, cambia en la rentabilidad que se obtiene. La principal diferencia está en que el interés compuesto sí suma los rendimientos que se vayan sucediendo, mientras que en el interés simple esto no sucede.
Por esta razón, ya que el porcentaje del interés va creciendo, el tiempo que se necesita para poder doblar la inversión decrecerá.
¿Qué conseguimos con la regla del 72?
Con la regla del 72, podremos saber cuántos años necesitamos para poder doblar una determinada inversión inicial. Para ello, nos bastará saber su tasa de rendimiento o la rentabilidad que vayamos a obtener. Entre los usos más habituales de éste índice, encontramos:
- Se aplica a lo relacionado con el interés compuesto
- Permite calcular el tiempo que puede tardar la economía en duplicarse (según su PIB). Por ejemplo, si crece una media de 2'5% por año, tardará 28'8 años en duplicarse (72/2'5).
- Nos permite saber el crecimiento que debe tener nuestra inversión para que la inflación no le afecte
- También puede usarse para determinar cuándo se acabará con el capital previsto para una jubilación.