Comisiones inmobiliarias

Atstock Productions || Shutterstock

Las comisiones inmobiliarias son un porcentaje de dinero que las agencias inmobiliarias o intermediarios inmobiliarios cobra al cliente final por la prestación de su servicio. Este tipo de comisiones es un porcentaje que se cobra al comprador final, a través del vendedor (la agencia).

Las nuevas tecnologías y el avance de Internet ha permitido que las agencias inmobiliarias online ofrezcan servicios cada vez más disruptivos y con ventajas frente a las inmobiliarias tradicionales.

¿Qué tipos de comisiones inmobiliarias existen?

Las comisiones inmobiliarias las podemos dividir en función de la agencia, de las condiciones que se impongan y de la tarifa que se aplique. De esta forma, hemos dividido las comisiones en diferentes apartados. Así como en el sueldo de un agente inmobiliario.

Comisiones de las agencias tradicionales

Las agencias tradicionales del sector siguen teniendo sus políticas habituales en cuanto a cobro de comisiones. Normalmente, estas comisiones viene a suplir costes de administración, gestión, entre otros.

En cuanto al importe de la misma, esto variará, obviamente, en función de la agencia. Lo habitual es que se cobre entre un 4 y un 6 % en cada transacción. Presentan similitudes y diferencias frente a las agencias online disruptivas, aunque también se tiene en cuenta factores como el inmueble o el nicho.

Comisiones por cuota única

Se trata de vender una vivienda a través de una tarifa. En este caso, las agencias inmobiliarias fijan un determinado precio a sus operaciones y el cliente paga únicamente por la operación que realice.


Tanto el cliente como la propia agencia inmobiliaria ahorrarán en comisiones y en costes por las operaciones que se realicen, pues el número de tareas y gestiones a realizar serán menores. Así mismo, los tiempos de venta también ayudarán a agilizar los procesos.

Tarifa plana única

En este caso, algunas agencias inmobiliarias deciden cobrar tan solo un coste de un porcentaje de la venta final de la vivienda.

Se trata pues, de un único porcentaje que se le aplica al precio final de la venta de la vivienda, por lo que el cliente no tiene por qué pagar comisiones extras u otros añadidos más que ese porcentaje.

Cobro según el tiempo de venta

Para esta modalidad, el cliente (propietario de una vivienda) acepta una comisión sobre el precio final de venta dependiendo de cuándo esta se efectúe.

La agencia inmobiliaria pagará más o menos porcentaje en función del tiempo que pasa desde que se solicita vender un inmueble hasta que efectivamente se produce la venta.