Precio
El precio es la cantidad económica o material que individuo paga para poder adquirir un bien, servicio o realizar cualquier otro tipo de objetivo.
De hecho, el precio que se paga por algo es aceptado por ambas partes (tanto comprador como vendedor). Si un determinado producto no vale lo suficiente como el precio establecido, el comprador no adquirirá el bien o servicio.
Es por eso que el precio se convierte en el valor que tanto compradores como vendedores han establecido, ajustándose un punto de equilibrio entre ambos. Es la ley de la oferta y la demanda pero, en este caso, aplicada al valor del precio.
El valor del precio
El valor que se le asigna a un producto o servicio es muy relativo. Depende mucho de las especificaciones y relevancia que al cliente final le aporte.
El precio, por su parte, no solo hace referencia al valor de un producto o servicio físico, también puede referirse al tipo de interés. En este sentido, los precios en el dinero (tipos de interés) servirán a las personas para poderse intercambiar dinero entre ella, y poner un valor al dinero que se prestan.
La importancia del precio
¿Qué importancia le damos al precio? La verdad es que mucha. En sociedades capitalistas, el precio se ha convertido en algo fundamental para poder consumir bienes y servicios. Digamos que poca gente puede disfrutar de algo si no tiene en cuenta el precio que le puede conllevar.
Si nos fijamos en todo lo que nos rodea, podemos identificar perfectamente su precio, pues es algo que ha determinado su compra. Y lo cierto es que el hecho de que tengamos algo o no puede estar condicionado del precio que ha costado, más que de la necesidad que teníamos (ya sea porque costaba menos o más).
Pero... ¿para qué sirve colocar un precio?
En muchos mercados, colocar un precio a algo nos limita bastante el público al que nos podemos dirigir. No obstante, también tenemos que reconocer que algunas veces se convierte fundamental establecer un precio.
Las funciones que suele desempeñar un precio son, principalmente, dos:
- Por un lado, un precio nos permite racionar el número de bienes y servicios que tenemos, así como establecer los factores que inciden en ellos. Es decir, limitar las unidades que se comercializa.
- Por otro, el precio sirve como incentivo para las empresas para poder ganar dinero. De esta forma, los beneficios que se obtengan irán destinados a conseguir nuevos productos o servicios que suplan las necesidades de las personas.