Ciclo de explotación

El ciclo de explotación es el período medio de tiempo que necesita una empresa para hacer un desembolso inicial de dinero en efectivo. Ese período lo necesita para producir bienes, para venderlos y para recibir dinero en efectivo de los clientes a cambio de los bienes.

Ciclo de explotación corto y ciclo de explotación largo

Una empresa con un ciclo de explotación extremadamente corto requiere menos efectivo para mantener sus operaciones. Por ello, puede seguir creciendo mientras vende con márgenes de beneficio relativamente pequeños.

Por el contrario, otra empresa puede tener márgenes elevados y, sin embargo, seguir necesitando financiación adicional para crecer incluso a un ritmo modesto. Esto ocurriría si su ciclo operativo es inusualmente largo.

Factores que influyen en la duración del ciclo de explotación

Si queremos mejorar o acelerar nuestro ciclo de explotación debemos tener en cuenta los siguientes factores. Pues, lo ideal es que este sea lo más corto posible para que se reduzcan las necesidades de efectivo de nuestra empresa.

• Las condiciones de pago que los proveedores conceden a la empresa. Los plazos de pago más largos acortan el ciclo de explotación, ya que la empresa puede retrasar el pago en efectivo.
• La política de cumplimiento de pedidos, ya que una mayor tasa de cumplimiento inicial supone un aumento de la cantidad de inventario disponible, lo que incrementa el ciclo operativo.
• La política de crédito, ya que un crédito más holgado equivale a un intervalo más largo antes de que los clientes paguen, lo que amplía el ciclo de operaciones.

Así pues, varias decisiones de gestión (o cuestiones negociadas con los asociados comerciales) pueden repercutir en el ciclo de explotación de nuestra empresa.

En definitiva, saber nuestro ciclo de explotación y mejorarlo en la medida de lo posible es útil para estimar la cantidad de capital de trabajo que necesitaremos para mantener o para hacer que nuestra empresa crezca.