Seguro

Un seguro es un contrato que se realiza entre una persona (el asegurado) y una compañía aseguradora con el objetivo de cubrir una contingencia en el caso de que ocurra.

Es decir, el asegurado recibirá una compensación si este o alguien de su entorno recibe un daño o perjuicio. Esta compensación puede ser monetaria o no monetaria, dependiendo en lo establecido en el contrato. Las personas que están aseguradas alrededor del asegurado también depende de lo establecido.

¿Qué se paga por un seguro?

El importe que se paga como prima por un riesgo depende de dos factores: el riesgo que vaya a cubrir el seguro, y la probabilidad de que ocurra en el tiempo. Con respecto a este último factor, cuanto más alejado o improbable sea en el tiempo menor será el importe a pagar por el asegurado.

Si el importe a recibir por el asegurado (o el riesgo) es muy grande, aparece la compañía reaseguradora. Esta compañía ayuda a la aseguradora a pagar el importe del usuario en cuestión.

Características de un contrato de seguro

Los seguros deben cumplir una serie de requisitos:

• Se asegura una parte llamada asegurado, y la protege otra parte que es la compañía aseguradora o reaseguradora
• El contrato debe formalizarse por escrito o, al menos, de forma digitalizada. El acuerdo verbal no es suficiente. Además, ambas partes deberán saber lo que están firmando y estar de acuerdo en ello.
• Debe existir un hecho para que el asegurado reciba una indemnización.
• La indemnización debe hacer que el asegurado vuelva a estar igual a la situación previa al siniestro o daño.
• Ambas partes deben regirse y actuar a favor del principio de buena fe.

¿Qué tipos de seguros me puedo encontrar?

Existen, principalmente, dos tipos de seguro: los de personas y contra daños.

• Seguros de personas: son aquellos que cubren a las personas; desde su integridad física hasta la salud que esta puede tener. Se incluyen seguros de vida, accidente o seguro por enfermedad.
• Seguros por daños: por otro lado, este tipo de seguros cubre daños ocasionados a muebles e inmuebles que el asegurado haya contratado. Entre los principales encontramos el seguro de vehículos (el obligatorio, el voluntario, el a todo riesgo, ...).